LOS
SISTEMAS EN 3D ¿BENEFICIOSOS O PERJUDICIALES PARA NUESTROS HIJOS?
Llegan las
Navidades y Papa Noel y los Reyes Magos están preparando sus cargamentos de
regalos para los niños de todo el mundo, pero como viene sucediendo en los
últimos años, las tecnologías han hecho que los sacos de juguetes hayan dejado
de llevar los tradicionales balones y muñecas, para llenarse de cables, chips y
tecnología del siglo XXI.
Pero la sorpresa
llega cuando tras poner en marcha el regalo del videojuego, película o
televisor en 3D, nos damos cuenta que nuestro hijo no percibe diferencias en el
juego que nosotros sí percibimos o a la inversa; es decir, no se apercibe de la
sensación de 3 dimensiones que esperábamos obtener, cuando no aparecen al cabo
de un tiempo ciertos dolores de cabezas o incomodidad en la visión que nos
hacen preocuparnos de los posibles efectos de dicho juguete.
Para poder ver bien
en 3 dimensiones, la sensación de profundidad, deben cumplirse dos requisitos
básicos; por un lado tener una relativa buena visión en ambos ojos, y por otro
lado que ambos ojos estén perfectamente alineados, es decir, no padezcamos
ningún tipo de estrabismo. Así cuando uno de los ojos es vago o cuando existe
una desviación ocular manifiesta, dicha sensación tridimensional no se consigue
y es el mismo efecto que cuando nos tapamos un ojo, perdemos la sensación de
poder calcular distancias y del relieve.
Por otro lado,
puede ocurrir que padezcamos algún tipo de desviación ocular, estrabismo, que
se mantiene latente, es decir, que no se manifiesta bajo las situaciones
habituales, pero que cuando requerimos un esfuerzo o una mayor atención de
forma continuada, puede descompensarse y por tanto obligarnos a realizar a su
vez un mayor esfuerzo, con los consabidos problemas oculares, los cuales pueden
manifestarse mediante cefaleas, visión doble, enrojecimiento, incomodidad,
etc….
Por ello debemos
decir que los sistemas de 3D, ya sean videojuegos, televisores, etc… NO OCASIONAN
DE NINGUNA FORMA ESOS PROBLEMAS, sino que cuando ocurren lo que están haciendo
es poner de manifiesto un problema que existía de forma más o menos escondida y
del cual no nos habíamos dado cuenta hasta la actualidad. Así, los sistemas de
3D, serían una especie de test beneficioso para detectar algunos problemas oculares que podrían haberse diagnosticado
con una revisión oftalmológica previa, si bien muchas veces han pasado
desapercibidos.
Decimos que los
problemas de ausencia de visión en 3 dimensiones pueden pasar desapercibidos,
pero realmente no es así, lo que ocurre es que no hemos relacionado algunos
signos que nos lo estaban indicando; Así una persona con ausencia de visión en
3 dimensiones no calculará fácilmente las distancias, lo cual en la vida diaria
puede manifestarse por ejemplo, al verter agua en un vaso a distancia, donde
debido a la dificultad para calcular distancias, podemos verterla fuera del
vaso, o por problemas al aparcar un vehículo dado que no calcularemos bien la
distancia con el coche de detrás y quedaremos muy alejado o lo golpearemos
repetidamente; son manifestaciones de una mala percepción de la profundidad y
que deben revisarse.
En la consulta de
nuestro oftalmólogo, especialmente si es alguien dedicado a estrabismos, la
detección de la calidad de la visión en 3D es algo muy fácil y que realizamos
mediante la visualización de un libro en 3D con unas gafas especiales, más o
menos como se hace en los cines en 3D; son sistemas parecidos a lo que
llamábamos hace años “libros mágicos”, que permitían ver en relieve. Mucho más
sofisticados, son los modernos sistemas de videooculografía que nos permiten
detectar alteraciones en los movimientos oculares con diferencias de 0,1 grados
de forma totalmente precisa, y de los cuales somos pioneros y expertos en la
Unidad de Estrabismos de OFTALMAR en el Hospital Internacional MEDIMAR de
Alicante.
Todos los niños
cuando se realizan sus primeras revisiones, uno de los conceptos que debe
analizarse es la visión de 3D, pues ello es parte de la exploración necesaria
para excluir problemas en los movimientos de los ojos y/o en la calidad de
visión.
Por lo tanto, no
debemos tener miedo a las nuevas tecnologías, pues todas las personas que no
tienen alteraciones en su visión, utilizan la visión de 3D desde la infancia,
con lo que los nuevos juegos y/o televisores en 3D lo que están haciendo es
aproximarnos más a la realidad de nuestra vida diaria.
Evidentemente, si
ya padecemos algún problema de visión, es preferible comentar con nuestro
oftalmólogo la utilidad de estos sistemas, no hagamos a Papá Noel o a los Reyes
Magos, venir cargados con un regalo cuya utilidad luego no va a ser la
esperada. Y si por cualquier motivo tras utilizar estos sistemas nos damos
cuenta de que tenemos algún problemilla, debemos consultarlo con nuestro
oftalmólogo especialista en estrabismos, pues él nos detectará la causa del problema
y valorará las posibles alternativas de tratamiento si fuesen necesarias.
Por último, no es
infrecuente el enrojecimiento o picor de ojos cuando abusamos del empleo de
cualquier sistema que nos obligue a realizar un esfuerzo visual mantenido. Ello
es debido a la disminución de la frecuencia del parpadeo por el exceso de
atención requerido, con lo cual el ojo manifiesta problemas de sequedad e
irritación, los cuales pueden solucionarse mediante el empleo de sustitutos
lagrimales o en su caso con un correcto tiempo de uso de cualquier dispositivo,
o minimizando su empleo. Como todo, el exceso de horas de manejo continuado de
un videojuego (sea 3D o no), no es algo que sea recomendable y los descansos
periódicos siempre son útiles y beneficiosos.
El siglo XXI ha
llegado y las tecnologías no se quedan atrás, por ello no debemos ignorar los
nuevos horizontes que se nos abren, pero sí debemos conocer sus límites y tener
una mentalidad abierta a las nuevas fronteras que se nos ofrecen. Disfrutemos
de los regalos que Papa Noel o sus majestades los Reyes Magos tengan a bien
concedernos. Felices Fiestas.
Fdo.
Dr Carlos Laria Ochaita
Director
Unidad de Oftalmología Pediátrica y Estrabismos.
OFTALMAR.
Hospital MEDIMAR Internacional de Alicante.